La reciente edición del Programa para la Evaluación Internacional de Estudiantes (PISA) 2022 ha arrojado luz sobre los desafíos educativos que enfrenta América Latina y el Caribe. La evaluación, que mide las competencias en Matemáticas, Ciencias y Lectura de estudiantes de 15 años, revela una situación preocupante en la región.

La región se encuentra en la mitad inferior del ranking global de calidad educativa en las tres asignaturas evaluadas por PISA: Matemáticas, Lectura y Ciencias. Este panorama destaca dos desafíos principales: el bajo desempeño educativo y la alta inequidad que afecta a los estudiantes más vulnerables.

En Matemáticas, tres de cada cuatro estudiantes presentan un bajo rendimiento, lo que significa que no alcanzan las competencias básicas. Este dato coloca a la región en una posición crítica, evidenciando un rezago de 5 años en comparación con la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE). A pesar de este panorama, Chile y Uruguay destacan como los países con mejor desempeño en Matemáticas, seguidos de México y Perú.

La inequidad en el acceso a una educación de calidad también es un tema preocupante. En promedio, el 88% de los estudiantes más pobres de la región tienen bajo desempeño en Matemáticas, en comparación con el 55% de los más ricos. Este desequilibrio subraya la necesidad de abordar la disparidad educativa y crear políticas inclusivas.

En Lectura, aunque la región ocupa posiciones más favorables en el ranking global, la mitad de los estudiantes no alcanza habilidades básicas. Este dato es aún más alarmante al observar el aumento en el porcentaje de estudiantes con habilidades insuficientes entre 2018 y 2022.

La edición PISA 2022 revela tendencias dispares en el desempeño educativo de la región. Mientras algunos países, como Colombia, Brasil, Chile, Argentina y Panamá, logran mantener su nivel de desempeño en Matemáticas con respecto a 2018, otros muestran una reversión preocupante de tendencias positivas previas.

Perú y México, que experimentaban mejoras antes de 2018, enfrentaron una reversión en su desempeño en Matemáticas. Costa Rica y Uruguay, por otro lado, experimentaron una caída en el rendimiento, sugiriendo la necesidad urgente de revisar las estrategias educativas implementadas.

La participación récord de 14 países de la región en PISA 2022 demuestra un compromiso creciente para identificar áreas de mejora. Este análisis crítico de los resultados globales destaca la urgencia de abordar los desafíos educativos y promover la equidad en la región.

En conclusión, PISA 2022 proporciona una radiografía detallada de la educación en América Latina y el Caribe. Es imperativo que los gobiernos, las instituciones educativas y la sociedad civil trabajen en conjunto para implementar políticas efectivas que impulsen un cambio positivo y garanticen un futuro educativo promisorio para la juventud de la región.

El 78% de los estudiantes chilenos que participaron en esta evaluación –principalmente de las clases de matemática– perciben que sus profesores están interesados en el aprendizaje de cada alumno, superior al promedio del 63% de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) para este tópico.

Atte. Patricio Figueroa M – Profesor de Matemáticas